Abdominoplastia tras el embarazo, ¿por qué realizarla?
Aunque algunas personas cumplen el sueño de bajar de peso, padecen la pesadilla de seguir cargando con el exceso de piel en su zona abdominal. La piel colgante puede ser, para muchos, un asunto del pasado gracias a la cirugía de abdomen o abdominoplastia, un procedimiento que está muy de moda porque elimina la piel suelta y ayuda a apretar los músculos para lucir una figura mucho más esbelta y definida.
Este es un procedimiento que más allá de tratarse de una cirugía estética es un proceso reconstructivo, ayuda a mejorar el aspecto del abdomen después de los embarazos o eventos traumáticos que comprometen la firmeza de los músculos del estómago.
Mediante una incisión baja pegada al pubis, se levantan estos tejidos y se cierran los músculos que están separados, se estira la piel, se retira el exceso de piel sobrante y se cierra. La cirugía se realiza bajo anestesia general, en una clínica acreditada y únicamente puede ser llevada a cabo por un médico cirujano plástico y reconstructivo.
Con los embarazos ocurren fenómenos como la apertura de los músculos abdominales, el estiramiento excesivo de la piel, las estrías, la laxitud de la piel y en ocasiones incluso aparecen hernias en la pared abdominal. Es por eso que su corrección se constituye más en una reconstrucción que en solo un procedimiento estético.
La abdominoplastia se puede combinar con lipoescultura y de esta forma tratar en mayor proporción el contorno corporal.