El drenaje linfático manual está indicado para todas aquellas mujeres que se hayan sometido a una intervención de aumento de pecho. Las mamoplastias de aumento son una de las intervenciones estéticas que mayores beneficios obtiene con la aplicación de esta técnica.
El objetivo que se busca es acelerar la reabsorción del edema y disminuir el tiempo de recuperación de la paciente.
En qué consiste el drenaje linfático manual
Esta técnica consiste en masajear la piel suavemente con movimientos superficiales y circulares a nivel de los tejidos que están por encima de la prótesis, evitando que la presión ejercida alcance el implante.
De esta forma se acelera la circulación linfática que se encarga de reabsorber el exceso de líquido que se acumula en los tejidos. Así se consigue disminuir el edema y la hinchazón del seno, por lo que la paciente notará cómo desaparece la tensión y las molestias en la mama de forma gradual.
Además, facilita la cicatrización de la intervención y ayuda a normalizar la sensibilidad de la mama.
Estos movimientos comienzan a realizarse a nivel de los ganglios linfáticos axilares y supraclaviculares, posteriormente se realizan en las vías de drenaje linfático y, finalmente, en los tejidos mamarios.
En todo caso, la dirección de las maniobras de drenaje linfático se dirigen hacia los ganglios axilares siguiendo los trayectos fisiológicos.
Todo el proceso se debe realizar sin aceites ni cremas, ya que su uso dificultará la realización correcta de las maniobras del drenaje.
Durante su aplicación las pacientes no deben sentir ningún tipo de dolor. En caso de que éste aparezca significa que no se está aplicando adecuadamente la técnica y entonces deberá reducirse la presión.
Las pacientes pueden comenzar con las sesiones de drenaje linfático manual a partir del segundo o tercer día tras la intervención, si el cirujano así lo autoriza.
Desde el primer día notarán cómo disminuyen las molestias, sobretodo de aquellas que tengan implantes en posición submuscular. También se beneficiarán de las ventajas del drenaje linfático manual quienes tengan las prótesis en posición subglandular o subfascial.
Las sesiones permitirán controlar la inflamación postoperatoria y acelerará la pronta recuperación, permitiendo así a la paciente reincorporarse a su vida cotidiana lo antes posible.
Drenaje linfático manual en mamoplastias de reducción y mastopexias
El drenaje linfático manual está totalmente recomendado tras las intervenciones de aumento de pecho. Por otra parte, los especialistas también han observado beneficios en su aplicación en reducciones de pecho y mastopexias.
En estos casos el drenaje facilita la cicatrización, ya que al reducir el edema se facilita la llegada de nutrientes necesarios para acelerar la curación post quirúrgica.
Asesoramiento profesional
A la hora de realizar el drenaje linfático manual tras intervenciones de aumento de mamas, reducción o elevación de pecho es sumamente importante establecer con el cirujano el proceso post operatorio para conseguir unos resultados óptimos con una garantía total.
En Clinimagen recibirás un asesoramiento profesional y personalizado de acuerdo a las características de cada paciente. Un equipo médico cualificado te dará todas las claves y resolverá las posibles dudas que te surjan en cada momento