Mantener una piel con aspecto saludable y joven es el objetivo de muchas personas con el paso de los años. Envejecer es inevitable, pero mantener a raya a las arrugas es posible. Uno de los tratamientos que más éxito tiene para combatir el envejecimiento cutáneo es la aplicación de relleno facial.
Los rellenos faciales son materiales o sustancias que se infiltran en diferentes zonas de la piel para reponer los volúmenes que se han perdido y rellenar los surcos, cicatrices o arrugas que se han formado con la edad.
Tipos de rellenos faciales en Medicina Estética
Los materiales de relleno facial son totalmente biocompatibles y se utilizan tanto para corregir los efectos del tiempo en la piel como para proporcionar más volumen a zonas específicas como los labios. Entre otras de sus características está que todos son reabsorbibles por el organismo, estériles e inmunogénicos. Existen varios tipos de rellenos faciales que se utilizan habitualmente en Medicina Estética.
Entre ellos destaca el más famoso y conocido por ser, al mismo tiempo, la sustancia infiltrable más utilizada en tratamientos estéticos: el ácido hialurónico. Es actualmente el material de relleno facial más demandado precisamente por su fácil colocación y por su nivel de tolerancia en el organismo.
Además del ácido hialurónico se utilizan otros materiales de relleno facial como el ácido poliláctico, la agarosa, la hidroxiapatita cálcica, el fosfato tricálcico, la policaprolactona y la grasa propia.
Entre todos estos materiales de relleno facial también sobresale el ácido poliláctico que produce un efecto más turgente en la piel proporcionando una mayor firmeza a los tejidos. Esto unido a que mejora y fomenta la producción de colágeno lo hace muy práctico y eficaz en pieles maduras. La agarosa también se utiliza en pieles de mayor edad porque su absorción es más lenta que en los demás materiales y sobre todo otorga volumen en las zonas que lo han perdido como los pómulos. Otra de las sustancias que se demanda cada vez más es la grasa propia que al tratarse de una sustancia autóloga es completamente tolerable por el cuerpo. El inconveniente de este tratamiento es que solo se mantiene una parte de la grasa inyectada ya que se absorbe más rápido que las demás sustancias.
Todos estos tipos de relleno facial son muy seguros y no generan riesgos ni efectos secundarios debido a su propiedad de biocompatibilidad, esto es, porque no necesitan la realización de pruebas de reacción. Otra de las características esenciales es que se trata de tratamientos que son temporales por lo que para mantener los resultados en el tiempo se deben reaplicar al menos una vez al año.
¿Dónde se puede aplicar el relleno facial?
Los rellenos faciales pueden aplicarse en muchas zonas del cuerpo, pero en el caso del rejuvenecimiento facial se aplican sobre todo en el rostro en diversas partes. Según el objetivo que busque cada paciente y tras el estudio previo del médico estético, estos materiales puede aplicarse para:
– El relleno pómulos.
– El relleno de arrugas y líneas de expresión de todo el rostro como las formadas en el surco nasogeniano, la zona peribucal y el código de barras.
– El relleno de labios.
– El relleno de ojeras hundidas.
En Clinimagen somos expertos en tratamientos de rejuvenecimiento facial con rellenos faciales. Por ello contamos con un equipo médico cualificado que se encarga de realizar estos tratamientos de forma segura y eficaz para lograr los mejores resultados.