Las arrugas del entrecejo, la frente y las conocidas ‘patas de gallo’ se vuelven una preocupación con el paso de los años. Para ello, el tratamiento con toxina botulínica se ha convertido en una de las grandes técnicas más utilizada de la Medicina Estética. Esta neurotoxina se inyecta bajo la piel con el objetivo de relajar los músculos y borrar las arrugas dinámicas. Y es que, además de eliminar las líneas de expresión de forma inmediata y sencilla, este tratamiento también tiene la ventaja de lograr un efecto rejuvenecedor sin necesidad de pasar por el quirófano. ¿Qué factores y pautas debemos tener en cuenta tanto antes como después de someternos al tratamiento? En este post te contamos todo lo que deberías saber.
Pregunta todas tus dudas en la primera consulta
Es normal que cuando acudas a la primera cita con el médico los nervios y la incertidumbre se apoderen de ti y que se te puedan olvidar muchas de las preguntas que tenías en mente antes de entrar a la consulta. Para evitarlo, es recomendable que anotes todas tus dudas previamente: cuánto costará el tratamiento, qué zonas se tratarán, cuánto tiempo dura el efecto o incluso cuales podrían ser sus efectos secundarios.
En esta primera consulta el médico observará e inspeccionará tu rostro al detalle para que también puedas conocer su valoración, saber si es realmente el tratamiento que necesitas según tus expectativas y cuáles serán los resultados.
No ocultes nada al médico
Informar al doctor acerca de tu historial médico es imprescindible. Cuéntale si se trata de la primera vez que te sometes a este tratamiento y cualquier detalle que consideres relevante.
Ten en cuenta que la aplicación de toxina botulínica tiene contraindicaciones en casos de enfermedades neuromusculares, alergias al huevo o embarazos.
Precauciones antes del tratamiento
Para conseguir unos resultados óptimos y una buena penetración de la toxina en los tejidos es importante llevar a cabo una serie de precauciones en los días previos al tratamiento:
- No tomar ningún medicamento que pueda afectar a la coagulación, como por ejemplo la aspirina. En caso de estar tomándolo RECUERDA comentárselo al médico.
- El uso de antiagregantes o la ingesta de alcohol tampoco es recomendable.
- Así mismo, se recomienda no tomar suplementos nutricionales que afecten a la coagulación como la vitamina E o el ajo. De este modo, evitarás la aparición de moratones.
Precauciones post – tratamiento
Una vez que el paciente se ha realizado el tratamiento, el médico le indicará una serie de recomendaciones que NO debe realizar, como:
- Masajear la zona tratada durante las siguientes 24 h.
- Acudir a saunas o piscinas, ya que pueden reducir el efecto del tratamiento.
- Consumir alcohol en grandes cantidades.
- Permanecer de forma horizontal durante las siguientes cuatro horas al tratamiento.
- Realizar ejercicio, especialmente los que impliquen mover la cabeza hacia abajo como por ejemplo, el yoga. Todo lo que altere la colocación de la toxina podría hacer que se difunda y no quedar con el efecto deseado.
- Lavar el pelo con la cabeza hacia abajo en las siguientes horas al tratamiento.
La aplicación de la toxina botulínica es muy segura y dentro de la estética nos abre un amplio abanico de posibilidades. Su efecto es temporal y sin duda una de las mejores opciones para conseguir una piel rejuvenecida y una mirada radiante. En Clinimagen contamos con un equipo médico especializado en tratamientos de Medicina Estética que estarán encantados de poder atenderte y ayudarte a conseguir lo que quieres con la mayor profesionalidad.