El balón intragástrico es uno de los tratamientos más conocidos para perder peso de forma rápida y sin grande sacrificios. No obstante, ¿Cualquier persona puede tratarse con esta técnica? En este post te contamos cuáles son los pacientes del balón intragástrico idóneos y, por el contrario, en qué casos no debe colocarse.
Pacientes del balón intragástrico: ¿Está indicado en todos los casos?
El balón intragástrico es una opción adecuada para muchos pacientes obesos o con sobrepeso. No obstante, no puede aplicarse a todos los casos ya que se trata de un tratamiento cuya duración es limitada y, por tanto, los resultados obtenidos también estarán limitados por el tiempo de durabilidad del tratamiento.
Al tratarse de un dispositivo que puede alojarse en el estómago durante seis o 12 meses, está especialmente indicado para paciente con un índice de masa corporal (IMC) entre 28 y 36, pero no superior a este. Esto quiere decir que se debe tratar de pacientes que necesiten perder entre 15 y 30 kilos de exceso de peso.
Dentro de este rango de personas, el balón intragástrico también está indicado para personas que tengan patologías asociadas al sobrepeso o la obesidad como:
- Pacientes con diabetes tipo II.
- Pacientes con hipertensión.
- Pacientes con obesidad mórbida que no puedan someterse a una cirugía bariátrica por elevado riesgo quirúrgico. En estos casos se indica aunque no vayan a perder la totalidad del exceso de peso pero sí se utiliza este tratamiento como inicio del proceso de una pérdida de peso mayor.
- Pacientes con obesidad mórbida que quieran someterse a una cirugía bariátrica y se les haya indicado previamente el balón para disminuir los riesgos quirúrgicos.
- Pacientes con sobrepeso que hayan probado sin éxito numerosas dietas y planes de adelgazamiento tanto farmacológico como con dieta convencional.
Contraindicaciones del balón intragástrico
En cuanto a aquellos casos en los que no se recomienda la utilización del balón intragástrico, en realidad no son muchos. Simplemente este tratamiento endoscópico no debe colocarse en pacientes que:
- Tengan un índice de masa corporal (IMC) inferior a 28.
- Tengan un índice de masa corporal (IMC) superior a 36 como tratamiento único. Esto quiere decir que se puede aplicar en esos pacientes siempre y cuando te trate de un tratamiento inicial para comenzar la pérdida de peso aunque no vayan a perder todo el peso que necesitan.
- Padezcan enfermedades hemorrágicas.
- Padezcan patologías digestivas como varices esofágicas o Ulcus duodenal.
- Tengan una hernia de Hiato superior a 8 centímetros.
- Se hayan realizado algunas cirugías gástricas previas en cuyo caso es necesario consultar primero con el especialista.
- Consuman habitualmente un tratamiento con medicamentos anticoagulantes.
En cualquier caso, estas son las contraindicaciones generales que se suelen determinar. Esto no quiere decir que no existan excepciones o casos particulares. Por tanto, lo principal es acudir a un centro médico de calidad y a un especialista en este ámbito para determinar si el paciente es realmente apto o no para colocarse el balón intragástrico.
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